“Mulier Caesaris non fit suspecta etiam suspicione vacare debet”
La famosa frase del Divino Cayo Julio César, y que nos traslada Plutarco, hace referencia a que por la importancia que tenía en la sociedad romana la mujer del César, esta no solo debía de ser honrada sino parecerlo. Según la historia, Julio César se divorció de Pompeya Sila al poco tiempo de ser ungido emperador, porque ella asistió a una “Saturnalia”, orgía sexual que se permitían las damas romanas de la aristocracia en algunas oportunidades.
Anunciado el divorcio, las más conspicuas matronas del patriarcado romano pidieron a Julio César la revocatoria de su divorcio ya que su esposa, Pompeya, había asistido solo como espectadora y no había cometido algún acto deshonesto. Julio César contestó: “La mujer del César no solo debe ser honrada, sino además parecerlo”.
Esta pequeña aclaración histórica, nos sirve de introducción, al tema que hoy trataremos de analizar, teniendo en cuenta que el análisis de nada, es difícilmente acoplable.
Me refiero a la Concejalía de Jardines. Si, si, esta Concejalía existe. Todos hemos dado una vuelta por Torrevieja o alrededores, y podemos ver como los famosos arbolitos incrustados en las aceras , están hechos un asco, los árboles de las avenidas de los barrios periféricos y urbanizaciones, campan a sus anchas , las zonas verdes (o lo que sea), son de todo menos verdes, los laterales de las carreteras de entrada nuestro pueblo, se los come la mierda (con perdón), de hecho hay varias asociaciones que dedican su tiempo libre a limpiar márgenes de carreteras y zonas verdes y todos hemos visto a la famosa “chana “ que recogía bolsas y papeles en la zona próxima al hospital. Se ha llegado al punto, de que se podría hacer un estudio sobre malas hierbas, solo caminando por las aceras de cualquier barrio.
Por suerte, he podido viajar por muchos pueblos y ciudades de España, y da envidia de ver como se trata el entorno, sobre todo en ciudades turísticas, es la imagen, es la cara, es la presentación al turista de como se cuidan las zonas comunes para disfrute de sus visitantes. Zonas verdes cuidadas, papeleras, zonas de ocio, carriles bici, zonas de patines, protecciones adecuadas en zonas peligrosas y un sinfín de actuaciones. En definitiva, CUIDADO, INVERSIÓN y MANTENIMIENTO, no todo pueden ser brindis al sol como informó el concejal de jardines en mayo 2016.
Los árboles y arbustos, se podan en su época, se fumigan cuando toca, se trata con herbicida cuando se debe y así un año tras otro. Y por supuesto, las palmeras. Si, esas que por suerte no han causado ningún daño personal y que no me vengan con cuentos del temporal de viento, hace falta mucho mas viento del que hizo para tumbar una palmera adulta, otra cosa es que esté enferma y ahí en cuando sucumbe por debilidad de las raíces. Solo un detalle, si alguien va a Orihuela por Montesinos, una vez pasada la gran rotonda que libra la autovía, hay una recta de 7 kmts., que lleva al cruce de San Miguel. Pues esa recta, flanqueada por una hilera de palmeras, hace unos años, estaban infectadas de picudo y nadie daba nada por ellas. Pues se trataron con intensidad y ganas de recuperarlas y ahí están ahora, vivas y lustrosas. La otra opción, es la que se tomó en nuestro pueblo, o sea dejarlas morir e ir arrancándolas según se iban pudriendo por falta de cuidados. Lamentable.
Está bien, manifestarse y quejarse por pensiones, igualdad, museos, deportes, valenciano, etc., pero aún no he visto a nadie quejarse sobre el estado de los jardines y zonas verdes, solo una series de fotos, que no consiguen sacar los colores a ningún responsable. Y poder se puede, es cuestión de voluntad y ganas de trabajar.
Manejar cientos de miles de euros en certámenes de Habaneras está muy bien, pero cuando tu trabajo además de esto, es tener el pueblo presentable y pasamos de ello, mal vamos.
Es como la mujer del Cesar, el concejal de jardines, además de serlo lo tiene que parecer.
JUAN CARLOS GARCÍA SALA
Vocal de Sueña Torrevieja